Selección e inspección externa
La selección durante el período de crecimiento es un factor crucial para la calidad de por vida y la longevidad de las primerizas de la granja. Aunque el criterio de selección más importante en una granja con Nucleus Management es el índice, las primerizas deben someterse a una selección continua basada en su aspecto físico y condición corporal.
La selección comienza en la sala de partos, donde las cerditas que presenten defectos y carencias no se seleccionarán para la reproducción.
A partir de un peso de unos 60 kg, es importante evaluar los aplomos. A la hora de hacer una evaluación de la conformación de las futuras reproductoras, uno de los elementos más importantes son las líneas de las cerditas, que incluyen el ángulo de las patas delanteras, las patas traseras y la línea del lomo.
Las líneas de la cerdita, en combinación con la posición de los aplomos, normalmente se evaluarán junto con la forma y la calidad de las pezuñas, donde es importante enfocarse en seleccionar las pezuñas sanas y uniformes. El mejor momento para hacer esta evaluación es cuando las cerditas están tumbadas descansando en los corrales. Esto brinda la oportunidad de inspeccionar a fondo todas las partes de las pezuñas, verificando incluso si hay grietas o mutaciones en el talón.
La selección de las reproductoras continuará hasta que se esté aproximando la primera cubrición, que es cuando se tomará la decisión final.
Otro factor esencial en la cría de las primerizas es la evaluación de su tasa de crecimiento en relación con la edad. Es importante realizar un seguimiento de la tasa de crecimiento para garantizar que las cerditas tengan una curva de crecimiento óptima.
Las primerizas deben seguir la curva de crecimiento óptima y mantenerse dentro del intervalo de peso especificado.
Garantizar un crecimiento adecuado según la edad y el peso asegurará la uniformidad y la mejora general de la longevidad. Si desea buscar soluciones para sus desafíos, consulte con su asesor de DanBred.
Las rutinas diarias deben preparar a las primerizas para una vida productiva como cerda. Esto incluye la mejora de la inmunidad de las primerizas y la adaptación a la inmunidad, para que coincida con el nivel sanitario del resto de las cerdas de la granja.
En colaboración con el veterinario de la granja, debe establecerse un plan de vacunación e inmunización para el período de recría y para las cerdas multíparas en general. El plan debe tener en cuenta la edad y el estatus sanitario de la granja.
Tareas durante el período de crecimiento
El diseño de los alojamientos y la alimentación no son los únicos puntos a tener en cuenta para el crecimiento de las primerizas; las rutinas diarias también son esenciales para su desarrollo y su consiguiente longevidad.
Las rutinas diarias deben organizarse según las tasas de crecimiento de las primerizas y deben tener en cuenta la mejor calidad posible de las cerditas, en lo referente a su físico y a su comportamiento.
Una vez al día o más a menudo:
- Inspeccione a todos los animales del lote.
- Esté atento a cualquier indicio de enfermedad o comportamiento divergente en general.
- Limpie los corrales, la parte lisa especialmente, pueden ser resbaladizos y aumentar el riesgo de caídas.
- Haga un seguimiento semanal de la tasa de crecimiento de cada grupo de edad.
Todas las rutinas y las tareas deben centrarse en buscar la uniformidad. El crecimiento de las primerizas y las experiencias que tienen durante este período configuran su comportamiento futuro y, a su vez, la eficiencia cuando se incorporan al resto de de cerdas de la granja.
Socialización de las primerizas
El contacto diario con las primerizas debe ser lo más tranquilo posible para garantizar una interacción positiva entre los empleados y las cerditas siempre que sea posible. Todas las rutinas durante el período de crecimiento deben centrarse en el comportamiento. Eso significa que es importante implementar unas rutinas adecuadas.
- Minimice el miedo entre las primerizas.
- Asegure siempre manejo tranquilo y predecible de las primerizas.
- Establezca un contacto positivo, sobre todo para las rutinas desagradables como la vacunación.
Esto dará forma al comportamiento de las primerizas, garantizando un efecto positivo en su futura productividad.
Sanidad e inmunización
Las rutinas diarias deben preparar a las primerizas para una vida productiva como cerda. Esto incluye la mejora de la inmunidad de las primerizas y la adaptación a la inmunidad, para que coincida con el nivel sanitario del resto de las cerdas de la granja.
En colaboración con el veterinario de la granja, debe establecerse un plan de vacunación e inmunización para el período de recría y para las cerdas multíparas en general. El plan debe tener en cuenta la edad y el estatus sanitario de la granja.
Recomendaciones sobre el programa de vacunación de las cerditas durante la recría
El veterinario de la granja siempre debe participar a la hora de establecer el programa de vacunación de la granja.
Vacuna | 1a vacunación | 2a vacunación | Revacunación | Comentario |
---|---|---|---|---|
Glässer |
12 semanas
15 semanas |
18 semanas |
Entre 2 y 3 semanas antes de cada parto |
|
Parvovirosis porcina (PVP) |
26 semanas |
3 semanas después
1ª vacunación |
3 semanas después de cada parto |
|
PCV2 | 4 semanas | 3 semanas antes del apareamiento | Entre 2 y 3 semanas antes de cada apareamiento | |
Clostridium (y coli) |
6 semanas antes del primer
parto |
2 semanas antes
del primer parto |
Entre 2 y 3 semanas antes de cada parto | |
Gripe |
26 semanas | 3 semanas después
de la 1ª vacunación |
Entre 2 y 3 semanas antes
de cada parto |
Esta vacuna puede administrarse periódicamente dos o tres veces al año. |
Además de un programa de vacunación cuidadosamente planificado, es importante adaptar un procedimiento con el veterinario de la granja sobre cómo garantizar la inmunidad de las primerizas para que coincida con el nivel sanitario del resto de cerdas de la granja, ya que esto puede ser un asunto complejo, sobre todo si están en alojamientos totalmente independientes.
Trazabilidad: garantizar la identificación individual
Uno de los factores más cruciales en la producción de primerizas se centra en la identificación individual de las reproductoras. Una vez que es posible identificar a cada una de las primerizas, será sencillo realizar una correcta selección.
Las cerdas recién nacidas deben marcarse con muescas en las orejas, tatuajes o crotales de plástico al nacer o poco después, siempre antes de igualar las camadas. En el momento del destete, como muy tarde, todas las cerditas deben registrarse con un número de ID individual que mantendrán durante toda su producción hasta el sacrificio.
Apuntar en la ficha
Aunque todos los animales estén marcados con un número individual, a veces es posible que los crotales desaparezcan. En este caso, es importante siempre poder recuperar el número de ID correcto de la cerdita en cuestión.
Una forma de hacerlo consiste en apuntarlas en una ficha, registrando todas las cerditas de cada corral. Naturalmente, las fichas deben actualizarse cada vez que un animal entre o salga del corral.
Esto merecerá la pena en caso de pérdida accidental de los crotales.
Si se pierde un crotal, será necesario reemplazarlo. Los crotales de repuesto se pueden rotular a mano o estar impresos. Se aconseja marcar con spray la ID del crotal en el lomo de la cerdita hasta que se coloque el crotal de repuesto y restablezca la trazabilidad completa.